Los constantes e incontrolables aumentos de precios y tarifas se convirtieron en el principal problema económico de la Argentina.

El economista del Centro de Estudios Scalabrini Ortiz (CESO), Andrés Asiaín, hizo un estudio a fondo sobre la historia de la inflación en nuestro país y a partir de ese análisis desarrolló una propuesta para combatirla.

Según su mirada, la inflación argentina "es inercial", que es cuando una economía convive ya un tiempo largo con esto y ya se empieza a incorporar a todos los aspectos de la economía, desde los contratos de alquiler -como inflación prevista- a las tasas de interés con porcentajes elevados.

"Se hace implicita la inflación en la tasa de los préstamos, está implícita en la demanda salarial, que este año se fijó en 40% sabiendo que iban a perder. La inflación del pasado se incorpora en las expectativas, los contratos, indexados de hecho y de derecho. Se transforma en un piso hacia adelante", profundizó Asiaín en diálogo con Nada del Otro Mundo de la FM 102.3, donde adelantó los ejes de su nuevo libro: "Inflación - Una costumbre argentina".

Para el economista del CESO, aunque hace años nadie le prestaba atención a su postura de plantear a la inflación argentina como "inercial", ahora "hasta el propio FMI con Guzmán pusieron la palabra inercial en algún momento". De todos modos, indicó que "cuando vas a las políticas ves que no lo toman en cuenta" y que "todos los jugadores del arco político aceptan el diagnóstico pero despues insisten en la misma receta como si no hubiera nada que hacer con la inercia, y te dicen que hay que bajar el déficit y la emisión".

En ese sentido, equiparó ese escenario con el acuerdo actual firmado con el Fondo: "En materia de precios es eso más Feletti atajando penales en alguna línea de precios. Esa política no hace nada con que la inflación esté implícita. Entonces va a fracasar, corta la bocha". Desde la mirada de Asiaín, se va reducir la emisión, la inflación va a seguir su curso y luego el Estado no va a poder sostener la reducción de déficit y emisión generando la necesidad de aumentar el gasto público. El economista también criticó los congelamientos por sectores, una receta que se aplicó en los últimos años en Argentina: "Lo mismo pasa con las tarifas o si vas y congelás el precio en un sector. Lo único que generás es un retraso relativo en el sector que después hay que ajustar".

Andrés Asiaín - Una propuesta contra la inflación - Nada del Otro Mundo by cba24n.com.ar

La alternativa: un acuerdo social de tres meses

Asiaín explicó la alternativa que propone para atacar la raíz de la inflación y que desarrolla y profundiza en su libro. Teniendo en cuenta que "los congelamientos parciales de precios fracasan porque los otros precios siguen aumentando, generan retrasos relativos en un sector que después se queja y les tenés que aumentar", el autor del libro sugiere "ir a un gran acuerdo social donde se haga un congelamiento total de todos los precios". Remarcó que, a diferencia de planes como el de José Ber Gelbard en los años '73 y '74, este acuerdo no debería ser por tiempo indeterminado sino por tres meses.

El economista señaló que algo muy parecido hizo Domingo Cavallo -ubicado en la vereda opuesta de su posición ideológica- durante el menemismo. "En esos tres meses de estabilidad hay que aprovechar la inercia que tira la inflación del pasado hacia adelante para tratar de empujar esa nueva estbailidad hacia adelante", explicó Asiaín. Para eso, se puede hacer una discusión paritaria del salario real con cláusula gatillo mientras se busca volcar esa estabilidad en los contratos de alquiler y la tasa de interés mientras "lo ponés a Feletti con un contexto más favorable a controlar que ningún empresario se zarpe remarcando".

El resultado que Asiaín esperaría de un plan así sería mantener la nominalidad durante los nueves meses siguientes "y ahí si volver a paritarias libres y sin congelamiento".