La espera es la de una reunión en la Secretaría de Trabajo, prevista para este jueves, y el contexto lo marca la delicada situación económica de la empresa Zanella.

Pero, a su vez, los cientos de trabajadores afectados esperan una voluntad más marcada de su propietario, Walter Steiner, quien hasta se negó a pagarles con vehículos, ya producidos, las deudas salariales que se acumulan.

Según se supo, en la planta de Caseros, Buenos Aires, llegó a ofrecerles un generador eléctrico a cada uno de los 130 empleados de la casa, además de $ 4.200 en efectivo.

La respuesta fue negativa desde la pata sindical, que visibiliza falta de voluntad y denuncia que se trata de equipos “viejos”, sin uso desde hace un tiempo.

Allí el único anuncio es el cobro de un Programa de Recuperación Productiva (Repro), que otorga el gobierno nacional, pero ninguno cobró los $3.500 correspondientes.

La firma viene arrastrando complicaciones y ya lo sufrieron trabajadores cordobeses, con el cierre de su planta en Cruz del Eje, donde 40 personas se quedaron sin empleo y aún esperan novedades de una indemnización.

La única oferta en tal sentido es pagar el 60% de lo correspondiente, y en ocho cuotas.

En Mar del Plata, la planta también fue cerrada, mientras que en San Luis, los 35 cesanteados acordaron cobrar dos tercios de la indemnización, en siete pagos.

En tierras puntanas no hubo cierre, pero los 70 empleados que quedaron, no cobran sueldo hace tres meses.

La denuncia de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) es que Zanella se encuentra en un proceso de tercerización del armado de motos hacia la firma Mar Maquinaria.