Este viernes, representantes de la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC) se reunieron en Olivos con el presidente Alberto Fernández. 

Allí conversaron sobre la situación del sector y desde la Cámara le acercaron una serie de propuestas económicas para un regreso paulatino a la actividad. Además, aseguraron que acompañan las decisiones de la gestión nacional en torno al coronavirus.

Jorge Luis Di Fiori, presidente de la CAC, planteó las medidas en torno a dos ejes. El primero referido a la posibilidad de establecer un aislamiento social selectivo, que permita un paulatino regreso a la actividad. 

Para ello, se propuso:

Autorización de tareas presenciales solamente a trabajadores, fuera de los grupos vulnerables, que residan en, por ejemplo, un radio no mayor a 5 km de distancia del lugar de trabajo para la primera etapa, luego de 20 km para la segunda, y así sucesivamente.

Establecimiento de horarios especiales para evitar la generación de “horas pico” en los medios de transporte. En la primera etapa jornadas de 6 horas y luego ampliarlas gradualmente.

Flexibilización de las restricciones que afectan la logística del comercio electrónico. La CAC busca así poder vender y despachar los pedidos directamente a través de un servicio de paquetería, correo o fletes habilitados.

Una amplia simplificación de trámites burocráticos y una pronta apertura, al menos parcial, de las sucursales bancarias.

El segundo eje: medidas de apoyo financiero e impositivo a las empresas. En este sentido se propuso:

Otorgamiento de un préstamo instantáneo y directo, a tasa cero, que se acredite en las cuentas sueldo de los trabajadores. El monto del préstamo debería ser equivalente a la diferencia entre el salario del trabajador y el pago que efectúe la ANSES (Asignación Compensatoria al Salario) o el Ministerio de Trabajo (Repro Asistencia por la Emergencia Sanitaria), según DNU 332/2020, de creación del Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción. 

Postergación de pagos de los aportes personales y aportes y contribuciones y ART correspondientes a los sueldos de marzo y abril. Apertura de un plan de facilidades de pago en seis cuotas para su cancelación con vencimiento a partir de los 60 días de finalizado el período de aislamiento.

Exención del 100% del pago de contribuciones patronales de los sueldos de marzo y de abril, extensible a los meses siguientes según la evolución de la pandemia y de sus consecuencias.

Postergación de los vencimientos de impuestos que operaban en abril de los tres niveles de gobierno (IVA, impuesto a los débitos y créditos bancarios, Anticipos de Ganancias, Ingresos brutos y tasas municipales).

Suspensión por dos meses de todos los regímenes de recaudación anticipada de los tres niveles de gobierno (retenciones y percepciones).