Giselle... ¡el ballet romántico por excelencia! La historia de amor eterna entre una inocente campesina y un noble se torna trágica cuando resulta que él ya estaba comprometido con una princesa. Giselle es presa de violentas alucinaciones y muere. Como castigo, una maldición condenará al príncipe a bailar hasta morir de cansancio...

Gisella es un ballet-pantomima en dos actos compuesto por Adolphe Adam con libreto de Jules-Henri Vernoy de Saint-Georges y Théophile Gautier. La coreografía original de Jean Coralli y Jules Perrot (1841) está aquí adaptada por Patrice Bart y Eugène Polyakov (1991). La música de Adam es de una gran riqueza melódica y da inicio a la renovación de la música de ballet.

¿Qué ha hecho Adolphe Adam en Giselle? No solo ha hecho la música más sinfónica que ha podido, sino que ha logrado lo que se suele denominar música culta; ha hecho bailar a las Wilis en una fuga, una verdadera fuga clásica, bastante sorprendida, a decir verdad, de encontrarse ahí. También ha hecho en Giselle verdaderos aires de danza... ¿Había entonces, en este enemigo de la música seria y de la sinfonía, un sinfonista que se ignoraba? El más famoso de sus ballets, Giselle, es una verdadera obra maestra. La instrumentación es original, colorista, maravillosa.
Estos conceptos fueron vertidos por Camille Saint-Saëns en Écrits sur la musique et les musiciens 1870-1921, obra publicada por Éditions Vrin.

Hoy compartimos: Giselle de Jean Coralli y Jules Perrot, música de Adolphe Adam.

Laëticia Pujol (Giselle), Nicolas Le Riche (Albrecht) – Cuerpo de baile de la Ópera Nacional de París, en el aniversario de su estreno un día como hoy de 1841.

Giselle ballet opera de Paris