El expresidente Jair Bolsonaro no entregó al Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU) las lujosas joyas obsequiadas por el gobierno de Arabia Saudita en 2021. El último lunes la defensa del excapitán del Ejército dijo que enviaría los ítems requeridos, algo que aún no sucedió.

El requerimiento de los abogados es para que el TCU reciba el kit de objetos que contiene un reloj, un anillo, broches y pendientes, todos fabricados por la casa Chopard, de Suiza.

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Ahora resta saber si Bolsonaro, quien aún permanece en los Estados Unidos, acepta o rechaza el requerimiento del TCU. El plenario debe decidir, al mismo tiempo, si la postura del ministro Augusto Nardes de permitir a Bolsonaro mantener los "obsequios" es legal o no.

Sin embargo, la Corte puede revertir la decisión y determinar que Bolsonaro se vea obligado a devolver los objetos al Estado. Las leyes marcan que los obsequios por parte de otras naciones a los máximos funcionarios políticos del país son, sencillamente, obsequios al Estado. 

El martes pasado, el exministro de Minas y Energía, Bento Albuquerque, afirmó en declaraciones a la Policía Federal que las joyas enviadas por Arabia Saudita serían "regalos de Estado", entregadas por un representante del gobierno saudí cuando la comitiva brasileña se preparaba para regresar a Brasilia, en octubre de 2021.

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La contradicción de Albuquerque: el funcionario había dicho a los auditores de la Receita Federal en el aeropuerto de Sao Paulo, el 16 de octubre de 2021, que las joyas (valuadas en 16 millones de reales, algo más de 3 millones de dólares) eran obsequios para Michelle Bolsonaro.

Con información de Carta Capital