El Gobierno de China anunció el confinamiento de la ciudad de Lanzhou, que tienen casi cuatro millones de habitantes y está ubicada en el centro del país, debido al aumento de casos de coronavirus en los últimos días, según informó el Gobierno municipal en un comunicado publicado en su página web.

La medida fue tomada a raíz de la aparición de 6 nuevos casos el día lunes en esa ciudad, que suma hasta el momento 39 casos activos y de acuerdo a la comisión sanitaria, hay ahora 603 casos activos en todo el país, 21 de los cuales se encuentran graves.

En ese sentido, el último rebrote de la enfermedad que data de mediados de octubre puso en alerta a las autoridades sanitarias chinas, ya que detectaron que fue producido principalmente por la aparición de la variante Delta. “La situación de control y prevención epidémicos en Lanzhou es grave y compleja”, aseguró el Gobierno en el comunicado, y agregó que la decisión se toma para evitar que el rebrote se siga extendiendo.

Lanzhou continuará con los testeos masivos a su población y en la ciudad habrá confinamiento y sólo se podrá salir para comprar víveres, recibir tratamiento médico o participar en las tareas de control y prevención contra el coronavirus.

Las personas sólo podrán salir a comprar víveres, hacerse testeos o participar en las tareas vinculadas al área de salud. Foto: Télam

Igualmente, para salir de las viviendas las personas deberán presentar un código de reconocimiento rápido (QR) de color verde en su teléfono móvil, el cual garantiza que la persona no está infectada o que no ha estado en contacto con contagiados.

El país cuenta con 1.450 millones de habitantes y se han aplicado un total de 2.250 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus y pese a lo avanzado de la campaña de vacunación, el gobierno sigue adelante con la política de tolerancia cero contra el Covid-19, aplicando confinamientos selectivos ante la menor aparición de rebrotes.

En distintos lugares del planeta, en los que también la vacunación está avanzada, se tomaron medidas ante la aparición de rebrotes, como una forma de prevenir la rápida propagación de la enfermedad, como lo sucedido en Reino Unido donde se prohibieron reuniones de más de 6 personas, medida tomada días atrás. 

También se dictaron restricciones localizadas en otros países de Europa, como Francia, Italia, España o Alemania y en Rusia, donde el aumento de casos comenzó a encender las alarmas de los sistemas sanitarios.