El portavoz de las Brigadas de Ezedin al Qasam, el brazo armado de Hamás, Abu Obeida, anunció la liberación de dos rehenes estadounidenses por "razones humanitarias" tras una mediación llevada a cabo por Qatar.   

Las personas liberadas son madre e hija, identificadas como Judith Tai Raanan y su hija adolescente Natalie Shoshana Raanan, quienes habían sido secuestradas en el kibutz de Nahal Oz, en el sur de Israel. La oficina del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, aseguró que las mujeres ya se encuentran en Israel.

Esta liberación, que tuvo lugar el viernes, es la primera desde el 7 de octubre. Hamás afirmó que esto fue un gesto destinado a "demostrar al pueblo estadounidense y al mundo la falsedad de las acusaciones" vertidas por el presidente estadounidense, Joe Biden, contra el movimiento islamista.

Biden había afirmado recientemente que Hamás busca "aniquilar" democracias.

Ver: EEUU envía ayuda militar a Israel

A pesar de esta liberación, los combates en la región continúan, con Israel llevando a cabo bombardeos en la Franja de Gaza. Según un portavoz del ejército israelí, estos bombardeos tienen como objetivo "preparar el terreno" para una posible invasión terrestre y "obtener información sobre los rehenes".

Hasta la fecha, los bombardeos israelíes han dejado un saldo de al menos 4.137 palestinos muertos y más de 13.000 heridos, según datos del Ministerio de Sanidad de Gaza.

La situación humanitaria en la Franja de Gaza es crítica, y la entrada de ayuda humanitaria está siendo obstaculizada por el cierre del paso de Rafah, en la frontera entre Gaza y Egipto. 

A pesar de cientos de camiones cargados con suministros humanitarios en espera, la ONU anunció que la entrada del primer convoy de ayuda se retrasará al menos hasta el sábado, mientras Egipto e Israel negocian la forma de inspeccionar los cargamentos.