Moscú ha amenazado durante este jueves con desplegar armas nucleares si Finlandia y Suecia se adhieren a la OTAN.

“No habrá nada más que hablar sobre cualquier estatus no nuclear de la región del Báltico, el equilibrio deberá ser restablecido”, ha asegurado el vicepresidente del Consejo de Seguridad ruso y exmandatario Dmitri Medvédev.

Los países de la región, entre ellos Lituania, advierten que la zona no se encuentra desmilitarizada y Rusia ya tiene allí armas nucleares, específicamente en el enclave de Kaliningrado. “La comunidad internacional está al tanto de ello”, expresó el ministro de Defensa lituano, Arvidas Anusauskas.

Medvédev también anticipó que esa adhesión -de los países nórdicos a la OTAN- supondría un mayor despliegue ruso en la zona: más leña al fuego. “Si Suecia y Finlandia entran en la OTAN, la frontera terrestre será el doble y, naturalmente, tendrá que ser reforzada. Será necesario aumentar drásticamente las defensas terrestres y aéreas, y desplegar unas fuerzas navales importantes en el golfo de Finlandia”, subrayó con firmeza el exprimer ministro ruso.

Bomberos realizan trabajos de demolición en un apartamento que sufrió daños tras un ataque con artillería pesada en Borodianka. Foto de Miguel Gutiérrez para EFE.
Bomberos realizan trabajos de demolición en un apartamento que sufrió daños tras un ataque con artillería pesada en Borodianka. Foto de Miguel Gutiérrez para EFE.

Suecia y Finlandia no son miembros de la OTAN -no todavía- pero sus representantes acuden con frecuencia a las reuniones que mantienen los miembros de la organización transatlántica, vinculada con los intereses norteamericanos e ingleses en la Europa continental. 

La colaboración entre Finlandia y Suecia y la Alianza se ha afianzado en los últimos tiempos; soldados nórdicos han participado en maniobras militares organizadas por la OTAN —como las del pasado marzo en el norte de Noruega— y desde que han comenzado los enfrentamientos en Ucrania, los ministros (de Exteriores y Defensa) han participado en todas las citas del grupo transatlántico, centro de las críticas de Putin y la Federación de Rusia.

Ver también: Ucrania hundió el buque Moskva, emblema de la flota rusa en el Mar Negro

Sumando tensión a la guerra atroz que está sucediendo hace mes y medio en el este de Europa, el secretario general de la Alianza, Jens Stoltenberg, dijo que los miembros de la OTAN recibirían exultantes a los dos países escandinavos si deciden dar el paso y ampliar la alianza.

“Es una decisión que deben tomar ellos desde su autonomía y soberanía”, señaló Stoltenberg la semana pasada, antes de la última reunión de los titulares de Exteriores.

Putin y Lukashenko miran en pantalla el lanzamiento de misiles rusos, el pasado 19 de febrero en Moscú. Foto de Alexey Nikolsky (AFP).
Putin y Lukashenko miran en pantalla el lanzamiento de misiles rusos, el pasado 19 de febrero en Moscú. Foto de Alexey Nikolsky (AFP).

En cuanto a la tensión nuclear, ya expresada por el gobierno de Rusia, que considera el uso de las armas nucleares si no son atendidos sus reclamos, el ministro lituano de Defensa, Arvidas Anusauskas, ha respondido este jueves a las declaraciones de Medvédev sobre la cuestión en la región del Báltico: “Las amenazas rusas resultan un poco extrañas cuando sabemos que, incluso sin la situación actual, Moscú cuenta con armas a 100 kilómetros de nuestra frontera”.

“Siempre han almacenado armas nucleares en Kaliningrado (enclave ruso fronterizo con Polonia y Lituania). La comunidad internacional, los países de la región, están perfectamente al tanto de ello. Lo usan como amenaza”, dijo al Canal BNS el ministro Anusauskas.

Voluntarios comen dentro de una antigua fabrica de muebles convertida en industria de guerra en Zaporiyia, Ucrania. Foto de Andrea Carrubba Anadolu para Getty Images.
Voluntarios comen dentro de una antigua fabrica de muebles convertida en industria de guerra en Zaporiyia, Ucrania. Foto de Andrea Carrubba Anadolu para Getty Images.

El equilibrio nuclear de la región podría resultar alterado por las acciones del aliado más cercano a Putin, el bielorruso Aleksandr Lukashenko. El Gobierno de Bielorrusia impulsó a finales de febrero —tres días después del inicio de la guerra en Ucrania— una reforma constitucional que contempla el despliegue de armas de destrucción masiva rusas en su territorio, que comparte fronteras con tres miembros de la OTAN: Polonia, Lituania y Letonia.

Días antes de comenzar la invasión de Ucrania, Lukashenko y Putin presenciaron juntos una exhibición de la amplia gama de misiles con capacidad de transportar ojivas nucleares de los que dispone Moscú.

A 50 días desde el inicio de las hostilidades entre los ejércitos ruso y ucraniano, hay más de 4,7 millones de refugiados, conteo que lleva adelante ONU. Sin solución política a la vista, el conflicto bélico persiste y aún no se vislumbra una solución negociada.

Un soldado ucraniano porta una bandera oficial y encabeza la comitiva que se dirige al cementerio de la localidad de Starychi, donde será enterrado un compañero de armas. Foto de Joe Raedle para Getty Images.
Un soldado ucraniano porta una bandera oficial y encabeza la comitiva que se dirige al cementerio de la localidad de Starychi, donde será enterrado un compañero de armas. Foto de Joe Raedle para Getty Images.

Fuente El País (España)