Una pareja de California, Estados Unidos, se enteró que su perro labrador llamado Marley tenía cáncer y, como "no estaban preparados para dejarlo ir", decidieron clonarlo. Este tratamiento existe y lo realiza una empresa de ese país, con un costo de 50 mil dólares.

La muerte de Marley ocurrió en 2015 y al día de hoy la familia es feliz con Ziggy que, según indicaron, "tiene la misma personalidad, juega igual y prefiere los mismos juguetes" que su anterior perro. 

A la hora de ser consultados por el elevado precio, la pareja aseguró que "no era nada en comparación al amor que sentían" por su mascota. Además, querían que sus hijos creciera con el mismo perro y tuvieran recuerdos alegres del animal.

Alicia y David, dueños de Ziggy
Alicia y David, dueños de Ziggy

Cómo funciona el proceso

La empresa ViaGen es la que ofrece un servicio de clonación de mascotas. Primero, se toma una biopsia del tejido del perro y se cultiva nuevas células en un laboratorio. Luego, se las congela.

Cuando el dueño del animal decide que se realice la clonación, la empresa toma una de las células y la usa para reemplazar el núcleo del óvulo de una perra. El óvulo y la célula se unen y el embrión comienza a crecer. 

De allí, el embrión se transfiere a una madre sustituta, que tendrá un gestación normal. Según la empresa, el clon es básicamente un gemelo idéntico.