Las autoridades de Portland han declarado un estado de emergencia de 90 días en un intento de frenar el uso y el impacto del fentanilo en esta ciudad de Estados Unidos, la más grande del estado de Oregón.

La extensión del consumo de fentanilo, un analgésico sintético 50 veces más potente que la heroína, es considerado el culpable del aumento de las muertes causadas por drogas en el país norteamericano.

En Oregón, el aumento coincidió con la decisión de despenalizar el consumo de la mayoría de las drogas, incluido el fentanilo.

Este martes, altos funcionarios estatales y municipales afirmaron que el uso tolerado de estupefacientes está dañando a Portland, una ciudad que ha visto cómo la indigencia y la adicción a las drogas se extendían en sus calles en los últimos años.

El fenómeno ha hecho que varias empresas importantes y no pocos residentes decidan trasladarse a otros lugares.

Según el condado de Multnomah, donde se encuentra Portland, el número de muertes por sobredosis relacionadas con el fentanilo aumentó un 533 % entre 2018 y 2022.

La gobernadora Tina Kotek anunció el estado de emergencia y reconoció que la ciudad estaba sufriendo un "daño económico y reputacional" debido al problema del fentanilo.

"Nuestro país y nuestro estado nunca han visto una droga tan mortalmente adictiva, y todos estamos luchando por encontrar una respuesta", dijo en un comunicado.

El uso del fentanilo se ha extendido en Estados Unidos en los últimos años, convirtiéndose en un gran problema político y sanitario.

Su uso y su impacto han crecido exponencialmente. En 2016 el fentanilo estuvo detrás del 62% de las muertes por sobredosis en Washington. En 2022, fue la causa del 96% de las muertes relacionadas con el abuso de drogas.

El presidente Joe Biden ha descrito la situación como una "tragedia" y su gobierno anunció en noviembre un plan federal basado en facilitar el acceso al tratamiento a los adictos y fortalecer la cooperación internacional. Algunos de los químicos que se utilizan en la fabricación del fentanilo se exportan en masa desde China y son procesados en México por grupos criminales.

Acompañada por el alcalde de Portland, Ted Wheeler, y la presidenta del condado de Multnomah, Jessica Vega Pederson, la gobernadora Kotek anunció el martes una nueva acción "tri-gubernamental" para hacer frente a la crisis del fentanilo.

La orden establece un "centro de mando " temporal en el que “los empleados estatales, del condado y de la ciudad se reunirán para coordinar las estrategias y los esfuerzos de respuesta", afirmaron Kotek, Wheeler y Vega Pederson en una declaración conjunta.

El plan también prevé que el Departamento de Salud del estado ponga en marcha una campaña en vallas publicitarias, transporte público y en internet para promover la prevención y el tratamiento de la drogadicción.

También contempla más alcance entre pares y recursos para los adictos, y que la Policía tome medidas enérgicas contra el tráfico abierto de drogas.

La gobernadora Kotek dijo que los dirigentes del condado, la ciudad y el estado actuarán con "urgencia y unidad" para empezar a hacer progresos frente al fentanilo.