La contaminación está matando a 9 millones de personas al año, lo que la hace responsable de una de cada seis de todas las muertes que ocurren en el planeta. Y son muertes prematuras y evitables.

El aire tóxico, el agua y el suelo contaminados “son una amenaza existencial para la salud humana y la salud del planeta, y ponen en peligro la sostenibilidad de las sociedades modernas”, concluyó esta revisión.

El número de muertes por contaminación eclipsa al de las muertes por accidentes de tránsito, el VIH/SIDA, la malaria y la tuberculosis combinadas, o por el abuso de drogas y alcohol. La pandemia del Covid mató a razón de unas 3 millones de personas por año, un tercio de la letal cifra provocada por la contaminación.
Los investigadores calcularon el impacto económico de las muertes por contaminación en 4,6 billones de dólares, unos 9 millones de dólares por minuto.

Más preocupante aún, el impacto general de la contaminación no mejoró desde la primera revisión global en 2017: desde entonces se han perdido 45 millones de vidas. La prevención no tuvo la presencia necesaria en la agenda de desarrollo internacional, dijeron los investigadores, y la financiación para mitigar estos problemas aumentó solo mínimamente desde 2015.

Las muertes por aire y productos químicos tóxicos han aumentado un 7 % desde la revisión anterior y un 66 % desde el año 2000, impulsadas por el aumento de la quema de combustibles fósiles, el aumento de la población y la urbanización no planificada. El aumento se vio compensado en parte por mejoras en los "antiguos flagelos" del agua contaminada por patógenos y el saneamiento deficiente y el humo interior de los fuegos para cocinar.

El profesor Philip Landrigan, del Boston College en los EE. UU. y autor principal del análisis, dijo: “La contaminación sigue siendo la mayor amenaza existencial para la salud humana y planetaria. La prevención de la contaminación también puede frenar el cambio climático, logrando un doble beneficio para la salud del planeta" por eso este informe pide una transición masiva y rápida de todos los combustibles fósiles a energía limpia y renovable.

La conciencia sobre la contaminación fue clave, dijo Richard Fuller, de la Alianza Global sobre Salud y Contaminación (GAHP) en Suiza, otro autor principal. Dijo que hasta la fecha ya se han presentado planes de acción a 11 gobiernos nacionales: "Los ministros están atónitos por el gran impacto que está teniendo la contaminación en su país". 

La nueva revisión, publicada en la revista The Lancet Planetary Health, analizó datos del proyecto Global Burden of Disease (Carga Global de Enfermedades) de 2019, el más reciente disponible, y encontró que la contaminación del aire causó casi el 75% de los 9 millones de muertes por contaminación.

Los productos químicos tóxicos provocaron 1,8 millones de muertes, incluidas 900.000 muertes por contaminación con plomo, más que por el VIH/SIDA. Además, el envenenamiento por plomo podría reducir significativamente la inteligencia en grandes poblaciones, dijo Fuller. Las fuentes que diseminan el plomo incluyen las tuberías de agua, ciertas pinturas, el reciclaje de baterías de automóviles en condiciones precarias y alimentos contaminados.

Es probable que la cantidad de muertes por contaminantes químicos sea una subestimación, dijeron los científicos, ya que solo una pequeña proporción de los 350,000 químicos sintéticos en uso han sido probados adecuadamente para determinar su seguridad. El cóctel de contaminación química que impregna el planeta ha superado el límite seguro para la estabilidad de los ecosistemas globales de los que depende la humanidad, informaron investigadores en enero.

No todos somos iguales

Más del 90% de las muertes por contaminación ocurren en países de ingresos bajos y medios, como India y Nigeria. Si bien los países de altos ingresos, como los EE. UU. y los miembros de la UE, habían controlado las peores formas de contaminación, dijeron los investigadores, pocas entre las naciones menos prósperas pudieron hacer de la contaminación una prioridad.

Lavar y aprovisionarse de agua en canales contaminados, una realidad diaria en Calcuta. Imagen: The Guardian / Rupak de Chowdhuri
Lavar y aprovisionarse de agua en canales contaminados, una realidad diaria en Calcuta. Imagen: The Guardian / Rupak de Chowdhuri

El agua insalubre causa 1,4 millones de muertes prematuras al año, pero esto ha disminuido debido a las mejoras en el saneamiento y la atención médica, particularmente en África. Sin embargo, la ONU estima que más de 2 mil millones de personas aún no tienen acceso a agua potable limpia.

Los investigadores pidieron una mayor financiación de los gobiernos y los donantes para el control de la contaminación, un mejor seguimiento y un nuevo organismo científico independiente para evaluar el problema, inspirado en el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático, cuyos influyentes informes son acordados por todos los gobiernos.

“La contaminación generalmente se ha visto como un problema local”, dijo Rachael Kupka, también de GAHP, que incluye el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente y el Banco Mundial. “Sin embargo, está claro que la contaminación es una amenaza planetaria. Se necesita una acción global sobre todos los principales contaminantes modernos”.