La Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba resolvió dar de baja la firma electrónica de Ricardo Bustos Fierros y le “ordenó atenerse al acuerdo que por mayoría designó a Sergio Pinto, juez federal de Bell Ville, como subrogante del Juzgado Federal 1″.

La resolución fue enviada por Graciela Montesi, presidenta del máximo organismo en la justicia Federal de Córdoba, y busca resolver la curiosa situación que se vive en ese juzgado, que hasta ayer tenía virtualmente dos jueces. Todo obedece a la resistencia de Bustos Fierros a abandonar su cargo, pese a que ya debe estar retirado. El 25 de enero venció la prórroga de cinco años que le había otorgado el Senado de la Nación al frente del Juzgado federal N°1, que condujo durante 30 años. 

Sin embargo, el miércoles 1 de febrero Bustos Fierros se presentó a trabajar, se sentó en su despacho y hasta firmó resoluciones, pese a que el juzgado ya tenía en funciones un reemplazante. 

La decisión de suspender la firma electrónica se debe, entre otras cosas, a que hasta este jueves Bustos Fierros firmó como magistrado. Su intención quedó plasmada en una carta de su puño y letra al presidente Alberto Fernandez, enviada el 23 de enero, en la que presenta su renuncia formalmente “a partir del 10 de diciembre de 2023”.