En el día de ayer, la Policía Federal estableció el vallado dispuesto en la Catedral Metropolitana para proteger a la Casa Rosada, antes de la marcha de organizaciones de mujeres por el 8M.

El vallado solo cubría el frente del edificio, y no afectaba la circulación de transeúntes y autos por la Plaza de Mayo. Según fuentes oficiales, esa fuerza "hizo lo que era habitual", pero sin tomar en cuenta que "el Presidente no quiere más vallas", tal como lo expresara ni bien asumió su mandato.

Por otro lado, la Secretaría de Gestión y Empleo Público de la Jefatura de Gabinete de Ministros, el Gobierno dispuso que hoy no haya control biométrico en las oficinas del Estado nacional y que no deberán efectuar descuentos a las empleadas que no asistan a sus trabajos.

"No sé quien se equivocó, pero Alberto llegó a la Rosada e hizo sacar todo", informaron fuentes cercanas al presidente a La Nación.

El vallado fue quitado en diciembre pasado, tras un acuerdo con el jefe de gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, empleados de la Ciudad comenzaron, el 9 de diciembre, a desmontar las rejas que rodeaban la Plaza de Mayo, día previo al acto de asunción de Fernández.