Pasaron varias horas desde que se inició el reclamo de la Policía Bonaerense por mejores salarios. Durante este miércoles, se instalaron en las afueras de la Quinta de Olivos y exigieron hablar con el gobernador Kicillof y el presidente Fernández.

Pero este reclamo fue repudiado en redes sociales por distintas figuras de la política argentina ya que lo calificaron como "extorsivo" y que presentaba un caso de sedición. El gobernador Juan Schiaretti fue una de las personas que se expresó sobre el tema. 

"Es inadmisible que fuerzas de seguridad estén rodeando la residencia del presidente de la Nación con el fin de ejercer presión", criticó Schiaretti, y añadió: "Estas acciones socavan la institucionalidad del país".

En la tarde de este miércoles, el presidente Alberto Fernández llamó a una reunión de urgencia para buscarle una solución al conflicto. Se espera que hable cuando finalice el encuentro y lleve tranquilidad a los habitantes de Buenos Aires.