Ambas madres fueron invitadas a exponer en una videoconferencia con legisladores para dar su testimonio sobre la muerte de sus hijos. Debieron presenciar una pelea por la "grieta" entre oficialistas y opositores que se echaban culpas sobre la responsabilidad de la violencia institucional en el país, entre aquellos que promovieron la doctrina Chocobar con Patricia Bullrich y el actual gobierno con las medidas de aislamiento y control policial.

En un primer momento, Cristina Castro, madre de Fernando Astudillo Castro, el joven desaparecido hace poco más de un año presuntamente por agentes de la policía bonaerense, expresó: “Es muy triste lo que ha pasado. Estamos hablando de violencia institucional y ver estos arranques de violencia, ver que no dejan por un segundo la bandera política de lado, duele. Duele porque estamos hablando de víctimas, de seres humanos. De personas. Duele saber que estas son las personas que nos representan. Por favor, ustedes representan a todos los argentinos, dejen sus banderas políticas de lado, es necesario que nos unamos para que no haya más víctimas. Porque a nuestros hijos no los devuelve nadie”.

“Perdonen que los abandone (de la videoconferencia), pero ya dejé de lado dos horas de mi trabajo y tengo que volver a trabajar. Porque las mamás que estamos acá somos laburantes. Nos dedicamos a eso. Una vida entera cuidando a nuestros hijos con mucho esfuerzo para que mueran en manos del Estado”, se disculpó y cortó la comunicación.

Luego, María Soledad Laciar, madre de Valentino Blas Correa –muerto de un balazo el año pasado por agentes de la policía provincial– dijo: “Tengo a mis hijos que esperan que les haga de comer, un marido que no trabajó hoy para cuidarlos porque me parecía muy importante estar hoy acá para que ustedes nos escuchen. Pero lo que acaba de pasar es una falta de respeto para nosotros".

"De verdad lo digo. No tienen idea del dolor que estamos pasando. Estar acá y escuchar como pelean, si son de un partido o de otro, no me importa; esto me convence que nunca participaría en política. Porque ver esto… sentí que nuestra presencia importaba poco. Les pido que hagan un mea culpa: nosotros estamos peleando para que se haga justicia por nuestros hijos y acá se están peleando. Creo que lo podrían haber dejado para otro momento”, agregó.