La segunda edición de una exhaustiva encuesta nacional realizada por un grupo de científicos del Conicet reveló los profundos cambios en las creencias, prácticas y actitudes religiosas en la Argentina.

Lo que se destaca es la reducción de la cantidad de personas católicas: en 11 años, pasaron de ser el 76,5 a ser el 62,9 por ciento de la muestra. Por otro lado, aumentó la gente "sin religión" del 11,3 al 18,9 por ciento y también los evangélicos, que crecieron en adherentes del 9 al 15,3 por ciento.

La muestra es considerada representativa y abarca 2.421 casos. Fue financiado por la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación.

Fortunato Mallimaci, quien encabeza el grupo de científicos, consideró que el catolicismo conserva en el país una “mayoría atenuada”, aunque progresivamente va perdiendo terreno. Dos de cada diez habitantes en el país se definen religión, siendo principal este rasgo entre los jóvenes de 19 a 29 años, que llega hasta el 24,7%.

A su vez, se notan diferencias a nivel regional: por ejemplo, en el noroeste argentino, que se caracteriza por ser la región más católica, se supera la media nacional por más de 10 puntos con el 76 por ciento de adherentes. En tanto, en la ciudad de Buenos Aires y la zona metropolitana junto a la Patagonia ese registro cae hasta el 51% de personas católicas, y donde se percibe una número de habitantes “sin religión” del orden del 26,2 por ciento y 24,3 por ciento, respectivamente.

En 10 años se redujo la cantidad de católicos en el país