A principios de febrero la justicia sobreseyó a los directivos de "Buenas Noches Producciones", quienes organizaron la fiesta electrónica donde Tania Abrile, en 2016. Los empresarios estaban imputados por el delito de "homicidio culposo".

La decisión, que benefició a Iván Aballay y Héctor Baistrocchi, fue tomada por la Cámara de Acusación. La familia de la joven espera que el Tribunal Superior de Justicia ordene que se haga un juicio oral, ya que presentaron un recurso de casación.

La mujer había asistido a una fiesta en el Orfeo Superdomo el 23 de julio de 2016, que encabezaba el DJ John Digweed. Falleció durante la madrugada del día siguiente y la autopsia reveló que había consumido éxtasis y metafentaminas durante la noche.

La justificación de los jueces se basó en que los hechos no encuadran en ninguna figura penal: “Aballay y Baistrocchi actuaron dentro del riesgo permitido por haber configurado sus conductas de conformidad a lo socialmente aceptado, esto es, organizando esta clase de evento sometiéndose al control que supone la autorización del órgano competente (y cumplimentando las exigencias que habían sido emplazadas mediante acta)”.

Otro dato que resaltaron al respecto es que el espectáculo desarrollado aquella noche había sido "habilitado por la Municipalidad”.