Luego del esperanzador comienzo de clases presenciales en la provincia de Córdoba, llegó la primera mala noticia. En la Escuela Juana Azurduy, una de las docentes se contagió de coronavirus y había compartido una reunión junto con unos diez profesores de la institución.

Esa reunión se trató de una previa al comienzo del ciclo lectivo con el objetivo de conocer el protocolo para evitar contagios y los docentes presentes debieron hisoparse y aislarse en sus casa de forma preventiva. Por este motivo, la escuela decidió cerrar sus puertas.

Una de las madres de los chicos que asisten a la institución relató a Cba24n.com.ar que hace tres semanas sus hijos comenzaron a asistir a la escuela por unas jornadas especiales y hace una semana las profesoras comenzaron a comunicar que había una maestra con coronavirus.

Ante esta situación, las docentes trataron de llevar calma pero esta madre explicó que tiene un hijo con discapacidad y por lo tanto es paciente de riesgo. Además, manifestó su preocupación debido a que no se sabe qué contacto han tenido con los alumnos.