El jueves por la mañana se registró un hecho lamentable en el Cementerio de Alta Gracia. Mientras familiares y amigos despedían el cuerpo de Leandro Vargas, el joven asesinado en Villa del Prado, dos empleados se agarraron a las piñas frente a todos los presentes.

Estos sujetos eran quienes estaban encargados de preparar la sepultura de Vargas. Aunque se desconocen los detalles, mientras realizaban su labor comenzaron a discutir y, finalmente, llegaron a golpearse.

Por supuesto, la escena no fue nada agradable para quienes estaban allí transitando un luto y fue un familiar del fallecido quien tuvo que frenar la pelea. Tras difundirse el hecho, el intendente Marcos Torres decidió desvincular a los trabajadores.

Así lo confirmó José María González, quien está a cargo de Recursos Humanos del Municipio. "El Intendente entendió que esto era inadmisible. Nosotros tomamos conocimiento del hecho y, tras ir al lugar, se realizó un informe por escrito", explicó.

"Es algo que atenta contra el decoro que tienen que guardar los empleados públicos municipales en el ámbito de trabajo en el desempeño de sus funciones”, concluyó González.

Con información de Resumen de la Región