A siete años del asesinato de Rodrigo Sánchez por parte de la Policía, su madre, Gabriela Sanso, se encadenó en Tribunales II para pedir la elevación a juicio de la causa.

"Hago responsable al fiscal general Juan Manuel Delgado por lo que me pase", expresó.

Rodrigo Sánchez fue asesinado el 19 de septiembre de 2015 por la Policía de Córdoba. Tenía 17 años. En un intento de robo, en Colón y Sagrada Familia, fue baleado cinco veces por la espalda, con dos tiros mortales en la cabeza y otra en la nuca, casi a quemarropa por el policía Lucas Carranza que estaba de franco.

Gabriela Sanso - Gatillo Fácil - Santiago Sánchez - Informe Jorge Vasalo

El policía tenía cocaína, marihuana y estupefacientes cuando asesinó a Sánchez. En 2017, Carranza volvió a figurar en medios de comunicación por intertar hurtar una campera en el Nuevocentro Shopping.

“Esta es una medida ante el cansancio y dolor, ante la complicidad y la impunidad”, declaró Gabriela.

La madre y familiares de Sánchez sostienen que la causa dirigida por la fiscal Jorgelina Gutiez está plagada de “irregularidades y demoras injustificadas”. 

Y remarcaron: “el policía que gatilló, Lucas Gastón Carranza, sigue libre”.

"Hay una causa armada con un montó de irregularidades. A mi hijo le pusieron pólvora en la mano, desaprecieron las cámaras de monitoreo", dijo Gabriela.

Gabriela Sanso - Gatillo Fácil - Informe Jorge Vasalo

El abogado de la familia, Adolfo Allende Posse, también remarcó algunas irregularidades. Afirmó que Gonzalo Cumplido, excomisario que había sido imputado en la causa Blas Correas, declaró como testigo del asesinato y afirmó que Sánchez tenía un arma en la mano.

“Sus declaraciones fueron muy contradictorias y dijo que vio un ”ademán de arma"", remarcó.

“La fiscalía de Gutiez instó el sobreseimiento del policía porque cumplió con su deber. Completamente drogrado”, agregó.

Adolfo Allende Posse - Gatillo Fácil Rodrigo Sánchez - Informe Jorge Vasalo