Por qué los jabalíes se convirtieron en una plaga peligrosa en las Sierras de Córdoba

El 26 de julio una familia que viajaba por las Altas Cumbres embistió un chancho jabalí que se le cruzó en la ruta. Afortunadamente, salieron ilesos pero el vehículo quedó destrozado. Días después, se hizo viran un video que muestra una piara de esos ejemplares en la misma zona, y quedó expuesta la problemática que se está viviendo: los chanchos jabalíes se convirtieron en plaga y al no haber un depredador que natural que los regule, su reproducción es incontrolable. 

No sólo es un peligro que ocasionen accidentes en la ruta E-34, sino también es preocupante el daño ecológico que están causando.

Hernán Casasnovas, guía de Montaña, sostuvo que hace tiempo que observan este crecimiento de la población de chanchos jabalíes y "ya se han hecho lamentablemente parte del paisaje, no solamente dentro del Parque Nacional sino en todo lo que son las Sierras Grandes", indicó en diálogo con la Crónica del Mediodía, que se emite por Canal 10.

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El especialista indicó que se trata de "una especie exótica invasiva porque se reproduce mucho, con esos colmillos que tienen van buscando raíces porque son omnívoros, así que comen de todo. El hecho de estar moviendo raíces, moviendo los suelos, comiendo los huevos de aves que nidifican en los pastizales o cualquier otra cría de mamífero hace que vayan causando un daño ecológico muy grande", explicó.

Al ser consultado sobre medidas vigentes para el control de las piaras en Córdoba, Casasnovas indicó que "hay una ley que ha sacado la Secretaría de Ambiente como un "coto de caza" para tratar de disminuir la población, es pos de la protección de las especies que son autóctonas. No es la idea para nosotros que somos conservacionistas pensar en matar animales, pero cuando se ponen en riesgo las especies locales propias nuestras, de alguna manera hay que tratar de controlar esta especie, ya que no tiene depredador natural", explicó.

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El jabalí fue introducido en la Argentina hace más de 100 años en la provincia de La Pampa por un coto de caza. Desde ahí y con el objetivo de utilizarlo como pieza de caza deportiva llegaron a casi todas las provincias.

Su reproducción está fuera de control y se convirtió en una peligrosa plaga que encuentra refugio en el Parque Nacional Quebrada del Condorito, donde no tiene predadores naturales ni está permitida su caza.