Los organizadores difundieron que, en total, fueron utilizados unos dos mil drones sincronizados con un software específico para el impresionante show.

Se pudo ver una esfera con una estrella azul, un corredor con movimiento real y la cuenta regresiva cuando faltaban pocos segundos para el fin de 2019.

Los drones estaban equipados con luces multicolores y no estaban controlados por pilotos, sino por una computadora central que los programó para volar en la creación de figuras.

De este modo, en dicha localidad de China reemplazaron los tradiciones fuegos artificiales.