La visita a España que realizaron Javier Milei y su secretario de Culto, Francisco Sánchez junto con una importante comitiva, sigue dando qué hablar pero por motivos diferentes a los que desearía el Presidente. 
Ya no hay referencias a la presentación de su libro ni de la supuestamente muy importante reunión con empresarios españoles. 
En cambio, muchos afirman que el motivo principal del viaje fue participar del festival Europa Viva 24, que organizó el ultraderechista partido Vox en Madrid.

Ya no está en discusión el “carácter” del viaje: hoy el vocero Adorni, en conferencia de prensa, reconoció que el viaje fue de naturaleza “privada", tal como se supo ayer luego de que se hiciera pública una nota de la embajada con tales precisiones. Adorni insiste en que la finalidad “privada” del viaje no le quita el carácter presidencial y, por ende, el gasto del erario público estaría justificado, al menos en el caso del presidente.

Denuncia

No lo interpretan así los diputados de la Unión Cívica Radical (UCR) que decidieron en la mañana del viernes presentar una denuncia contra ambos libertarios por usar recursos públicos para viajar a España y participar de ese evento ultraderechista. Dicen en la denuncia que el viaje fue “un paseo europeo de weekend”.

Los legisladores nacionales (UCR) Fernando Carbajal, Pedro Galimberti y Manuel Aguirre solicitan que se investigue la posible comisión de los delitos de peculado y defraudación al Estado. La denuncia aterrizó en el Juzgado Criminal y Correccional Federal 4. Juzgado que está a cargo ni más ni menos que del candidato a supremo Ariel Lijo.

Cuenta el diputado Carbajal en su cuenta de X que la información publicada en los medios les pareció suficiente para avanzar con la denuncia que menciona explícitamente al Presidente Javier Milei y al Secretario de Culto Francisco González, pero que es extensiva a “otras personas y funcionarios que puedan resultar del curso de la investigación”.

X del Diputado Nacional Fernando Carbajal

Ayer, extraoficialmente, la Casa Rosada señaló que el Embajador Roberto Bosch cometió un “error”, que el propio embajador se negó a comentar. Hoy, en conferencia, el vocero Adorni desistió del “error” e insistió con que el viaje tenía carácter oficial por la reunión que Milei mantuvo con un grupo de representantes de empresas. Además señaló que la definición que se utilizó en el documento firmado por Bosch es un tecnicismo protocolar de la cancillería.

A la carga, radicales

Los diputados denunciantes no le creen: “El Gobierno, a través de su inefable vocero Manuel Adorni, ha pretendido otorgar carácter ‘oficial’ al viaje realizado por una modestísima reunión con empresarios que habría realizado el día sábado". 

"Es indudable que esa pequeña reunión, armada de apuro, constituyó solo un burdo intento de otorgar algún tipo de justificación jurídica al viaje privado del Presidente, para así poder justificar los cientos de miles de dólares propiedad del Estado nacional gastados para asistir a actos de naturaleza estrictamente personal y a su exclusivo beneficio”.

Culto, más complicado

Lo cierto es que corresponderá a la justicia dilucidar si la visita del presidente puede considerarse “oficial” en base a esta reunión con los empresarios. Eso si, el viaje que no tiene pies ni cabeza es el del secretario de culto que, curiosamente, eligió el viaje a España para levantar su perfil.

“Por su parte, el secretario de Culto de la Nación viajó a España con el mismo objetivo de asistir al evento de la ultraderecha europea anti-Estado, pero eligió hacerlo con la plata del Estado argentino. Más modesto, no viajó en avión particular, pero sí se pagó un pasaje en primera clase con fondos públicos y se otorgó los correspondientes generosos viáticos”, aseguraran los diputados en su denuncia.