La bajante del río Limay y Neuquén causada por el período de sequía tiene su impacto en la región. Los caudales de los ríos se encuentran tres veces por debajo de su promedio. Desde la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) sostuvieron que igualmente está garantizada la provisión de agua, aunque marcaron que se requieren obras para canalizar la provisión.

En tanto, desde el Ente Provincial de Agua y Saneamiento (EPAS) indicaron que la baja ya afecta el suministro de casi un 10 % de la población de la capital provincial.

Elías Sapag, presidente de Emprendimientos Hidroeléctricos Sociedad del Estado Provincial del Neuquén (Emhidro) y representante por Neuquén en la AIC marcó que el escurrimiento de los lagos en el Limay y Neuquén está en el orden de los 400 metros cúbicos por segundo. Esto es un tercio de su caudal habitual. 

Foto: Francisco Carnese.
Foto: Francisco Carnese.

En declaraciones a Vos A Diario por RN Radio, Sapag señaló que ante este panorama “se está sacando 220 metros cúbicos por segundo, es decir se está pensando en guardar agua». Aseguró que aguas abajo de Arroyito “no se va a sacar más de 170 metros cúbicos y desde el Chañar no se va a sacar más de 35-50 metros cúbicos”.

Sapag describió sobre la Emergencia Hídrica, que mayo sigue siendo "un mes seco", excepto a fin de abril e inicios de mayo con la lluvia y nieve, "que dio un pulso para recargar la napa subterránea, los lagos naturales".

El representante en la AIC dijo que es necesario garantizar el año hídrico 2022-2023 y "para eso es necesario acumular agua". 

Al mismo tiempo llevó tranquilidad y aseguró que está garantizada la provisión de agua. “Lo que hay que hacer son otras de canalización. Hacer que las bombas no queden en vacío. De esa manera no puede y no debe haber falta de agua para ninguna de las plantas de tratamiento", sostuvo Sapag. 

Los ríos neuquinos están tres veces por debajo de su caudal

Estas obras es lo que se visualiza en la zona del puente de ingreso al Paseo de la Costa. Desde la subsecretaría de Recursos Hídricos hay tareas de dragado y reencauzamiento del río Limay.  Desde el EPAS indicaron que la bajante extraordinaria del río LImay afecta el servicio en la zona este de  la ciudad de Neuquén y que repercute entre un 5 y 10 % de la población de la capital provincial. 

“Estamos en una situación extraordinaria de la bajante del río Limay. El río Neuquén también pero no afecta porque no tenemos ninguna toma activa. Donde tenemos más complicaciones es en el río LImay donde tenemos varias captaciones en lo que es Río Grande,  Anaya, Leguizamon y Balsa Las Perlas”, señaló Esteban Rodiriguez, gerente del servicio en Neuquén del EPAS.