En la Unidad Penal 2 de la ciudad de Oberá, Misiones, un interno murió jugando al fútbol entre reclusos de la colonia de dicho penal. El sujeto, reconocido como Néstor Barúa, había sido trasladado al Hospital Samic de Oberá. Sin embargo, llegó sin vida al nosocomio.

El jefe del Servicio Penitenciario Provincial, Manuel Dutto, sostuvo que “siempre se le hacen chequeos al personal, al ingreso a cualquier unidad penitenciaria, como también reciben atención de salud en los hospitales locales. Se cuenta con personal médico para asistencia permanente, pero esto es difícil prever”.

“Estamos tramitando que el colectivo comunitario de salud pública pueda asistir a la Unidad penal, ya que es difícil trasladar a todos los internos al Hospital para hacer chequeos de esta naturaleza. Igualmente, en la cárcel de Oberá contamos con 4 médicos que están atentos de manera permanente a cualquier situación”, señaló, al tiempo que indicó que dentro del sistema provincial hay 1.700 internos.

En ese sentido, contó que 72 tienen perpetua. “El sistema le da muchas herramientas de capacitación a los presos, aunque la ley de ejecución penal no prevé reducción de años para el que tiene perpetua, son 35 años que debe cumplir sí o sí, entonces muchos ni siquiera quieren capacitarse porque su salida es cuando cumplan ese tiempo”.

Fuente: Misiones Online.