Pese a que durante algunas semanas las partes intentaron acercamientos, no llegó a buen puerto el pedido de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), que a nivel nacional había solicitado que se adelanten las negociaciones paritarias y las empresas otorguen un incremento salarial (la idea central era un bono de $ 25 mil) basado en los altos índices de inflación de los últimos meses.

Sin embargo, las partes no estuvieron siquiera cerca de lograr un acuerdo.

Por eso, los trabajadores anunciaron la realización de un paro de ocho horas, a partir de las 22:00 del martes.

La decisión afecta a todos los servicios de transporte urbano que se prestan en el interior del país, incluida la provincia de Córdoba, hasta las seis de la mañana del miércoles.

En la Capital, la delegación local adelantó su adhesión a la medida.

Sin embargo, la expectativa de la jornada de hoy es que el Ministerio de Trabajo de la Nación pueda intervenir en el conflicto.

A partir de allí, la posibilidad de decretar una conciliación obligatoria está latente, para que los colectivos no se frenen.