El lunes 18, en el Tribunal Oral Federal N°2, comenzará el juicio contra el fiscal federal San Francisco, Luis María Viaut por los delitos de concusión agravada y tráfico de influencias. 

El caso es inédito. No hay en la historia de Córdoba fiscales federales sentados en el banquillo de los acusados por delitos comunes. Sólo en 2017, un puñado de ex funcionarios federales, entre ellos un fiscal, recibió condenas por crímenes contra la humanidad, por hechos cometidos durante la última dictadura. 

Viaut fue denunciado en julio de 2020 por un cooperativista, a quien le exigió US$ 2,5 millones para cerrar una causa por facturas apócrifas. También irá a juicio por exigir una coima de US$ 250,000 para lograr la liberación del hijo de un empresario acusado de violación. 

No estará solo en el proceso. Darío Rivarola, el portero de la fiscalía, está acusado de los mismos delitos y actuó como intermediario o agente de contacto del fiscal. También Gerardo Panero y Walter Gustavo Fattore están imputados por tráfico de influencias, y Víctor Hugo Brugnoni por cohecho activo (pago de coima).

Según la causa, Vaiut dirigía las maniobras que Rivarola y compañía se encargaban de ejecutar. Surge, con detalles escandalosos, de las escuchas telefónicas. En algunos casos, Viaut es mencionado como “el mandamás”. Él mismo da indicaciones de “hacer desaparecer unas cositas”. 

Las claves para hablar del dinero cobrado en las coimas son “lechuga”, “chorizo” y “salames”.  En una de las escuchas telefónicas el empleado judicial Rivarola le cuenta a su jefe que llevaba “lechuga”, en referencia a los dólares. En otras intervenciones, los sospechosos hablan de “chorizo” o “salames”, claves utilizadas para referirse a los pagos ya recibidos. También en las grabaciones se lo escucha al fiscal Viaut hablar de “dos kilos”, que podrían ser “dos millones”, según sospecha la fiscal de Villa María Marta Schianni, encargada de investigar el caso. 

Es el mismo fiscal quien dice en un momento: “Estoy acá enloquecido, soy como un león enjaulado. El número es una cosa de locos”. Hablando del dinero cobrado, agrega: “Cómo te levanta el ánimo, no”. Los pasajes, constan en el requerimiento de elevación a juicio al que este medio accedió. 

El tribunal estará presidido por Noel Costa e integrado por los vocales José Fabián Asís y Julián Falcucci. El fiscal acusador será Carlos Gonella. Viaut llega a juicio en uso de licencia médica y será defendido por Tristán Gavier, quién pidió la nulidad de toda la causa a la Cámara Federal de Casación Penal.

Será juzgado junto a un empleado de la fiscalía a partir del 18 de abril. Foto: La voz de San Justo
Será juzgado junto a un empleado de la fiscalía a partir del 18 de abril. Foto: La voz de San Justo

Para que quedes limpio

El caso saltó a la luz en julio de 2020, cuando la pandemia por Coronavirus ocupaba la agenda mediática y social. Pablo González, un dirigente de la Cooperativa Tambera Las Cañitas de El Tío, se presentó en la Fiscalía Federal general para denunciar que Viaut le había querido cobrar una coima para frenar una causa judicial por facturas truchas. para negociar, el fiscal envió a Darío “Paco” Rivarola, un empleado raso de su fiscalía, pero de su máxima confianza. 

Rivarola mantuvo varias reuniones con González, según consta en la elevación a juicio a la que este medio accedió. Rivarola se comprometió a “hacer algo” para que “no quede nada” de la causa en contra de la cooperativa. “Vas a quedar limpio, limpio, limpio, pero después a cuidarse”, le dijo. a cambio, debía pagar una coima de más de $2 millones. 

“Si podemos hacer algo, que no sea con las cosas a medias; si se puede hacer algo que lo hagamos bien, cosa que no quede nada, que quedes limpio, limpio, limpio, pero después a cuidarse”, le advirtió Rivarola al gerente de la cooperativa. El pedido de coima fue de más de $2 millones y González respondió que iba a discutir la propuesta con los otros directivos y darle una respuesta.

González decidió asentar la denuncia en la fiscalía federal de Córdoba, institución que designó a la fiscal de Villa María, María Marta Schianni, como encargada de investigar el accionar de su colega de San Francisco. Schianni trabajó durante nueve meses en silencio y con minuciosidad, para llevar a su colega a juicio. Durante esos meses de 2020, Viaut levantó su perfil público con dos causas de relevancia en las que intervino: un megaoperativo por evasión fiscal denunciada por AFIP y una causa por narcotráfico que involucraba a dirigentes de un club de fútbol de San Francisco. 

Solo entonces, cuando bajó su perfil, Viaut fue allanado. De su despacho, además de documentos, celulares, y computadoras, se llevaron unos 9 mil dólares y cerca de 850 mil pesos. 

Abuso sexual 

La otra causa por la que será juzgado Viaut es por el cobro de US$ 17.100, que el empresario Víctor Brugnoni le entregó para que el fiscal federal de San Francisco lograra la liberación de su hijo José Agustín Brugnoni (23), detenido e imputado en diciembre de 2019 por abuso sexual por la Justicia provincial de Córdoba. Era el primer pago de un total de US$ 250 mil, la suma total sería completada cuando el joven acusado de violación recuperara su libertad. 

En este caso, fueron investigados e imputados como intermediarios Gerardo Agustín “Coco” Panero y Walter Gustavo Fattore; mientras que Brugnoni fue acusado de pagador de la coima, delito tipificado como cohecho activo. 

Viaut está en uso de licencia desde diciembre de 2020 y con carpeta psiquiátrica. En diciembre pasado fue visto en una fiesta "solo para hombres", según informó un medio local. De allí, salió profiriendo amenazas para los periodistas. Aún sigue cobrrando su sueldo.