La sífilis es una infección de transmisión sexual (ITS) que afecta de igual manera a hombres y mujeres. El contagio puede darse a través de una relación sexual sin uso de preservativo, o  de manera congénita durante el embarazo. En diálogo con Alta Mañana AM 580, el jefe del Programa Provincial de VIH/SIDA, ETS y Hepatitis del Ministerio de Salud, Diosnel Bouchet, subrayó la importancia del diagnóstico temprano. 

La infección de la sífilis se trata y cura con la penicilina, un antibiótico que responde al carácter bacteriano de la enfermedad. A pesar de ser una enfermedad común, destacó que la ausencia de síntomas o la presencia de unos muy leves deriva en pocas consultas y aún menos diagnósticos. 

“La única forma de saber si se padece este problema de salud es mediante un test”, remarcó. 

Asimismo, explicó que sumado a la falta de sintomatología también dificultan su tratamiento el estigma y los prejuicios alrededor de esta enfermedad. En este sentido, profundizó: “Todos los criterios moralistas derivan en que la gente niegue, descarte o no se perciba como población de riesgo para contraer la enfermedad”.

Una vez en el organismo, esta infección atraviesa varias etapas. La primera de ellas es sintomatológica y aún así puede pasar desapercibida, luego en la fase secundaria puede aparecer erupción en el cuerpo una vez desaparecida la llaga inicial. La tercera fase es una de las que mayor riesgo representa debido a que no hay síntomas y puede permanecer de esta manera durante muchos años, también es conocida como etapa latente. 

“Esta infección se trata y se cura, hay criterios muy claros para el control con análisis y hay un dispositivo montado de salud pública que se expande hacia la comunidad”, sostuvo. 

La sífilis durante el embarazo 

Uno de los riesgos de esta ITS es que se puede transmitir durante el embarazo al bebe en gestación, algo que representa un riesgo de salud importante para el no nacido y la persona embarazada. Acerca de esto, recordó que siempre es recomendable realizar una consulta “preconcepcional” que permita descartar cualquier riesgo. 

Ya durante el embarazo, Bouchet insistió en que es de gran importancia realizar testeos de VIH, sífilis y hepatitis para descartar que la persona gestante esté atravesando alguna de estas enfermedades. “También es importante que lo haga la pareja, ya que no hay garantías de que una persona lo atraviese y otra no, y lo puede transmitir”, agregó. 

Los riesgos durante el embarazo disminuyen con un correcto diagnóstico y tratamiento. Foto: archivo.
Los riesgos durante el embarazo disminuyen con un correcto diagnóstico y tratamiento. Foto: archivo.

El no diagnóstico de la sífilis puede acarrear consecuencias graves si no se trata a tiempo, entre ellas dificultad de movimiento de brazos y piernas, parálisis, entumecimiento, alteraciones visuales y enfermedades del corazón. A lo largo de la vida, puede comprometer seriamente los órganos profundos y el sistema nervioso. 

Ante un crecimiento de casos de sífilis, Bouchet indicó que esto se debe a múltiples factores conductuales, especialmente la falta de uso de preservativo. “Yo recomiendo a la población en general que si ha tenido al menos una relación desprotegida, se acerque al sistema de salud y se haga un testeo”, finalizó.