Mirá el video de un hombre de amarillo que tenía en sus pies el futuro del partido. En una favela de Brasil y cancha de futsal, el 11 vivió una situación indescriptible para él con amenazas, gritos, empujones y un arma apuntando a sus pies.

Claramente, cualquier tipo de presión de la que hablan los jugadores queda atrás cuando crees que tu vida está en juego.

Aún así, se animó a patearlo sabiendo que cualquier cosa podía ocurrir y el final de la jugada con semejante presión: lo erró.