Las inundaciones repentinas, como las que se han visto en los últimos años y especialmente en lo que va de 2021, ocurrirán cada vez más frecuentemente a medida que empeora la crisis climática, advirtieron los científicos. El gobierno, las empresas y los hogares de todo el mundo deben hacer mucho más para protegerse contra daños futuros.

El Dr. Jess Neumann, hidrólogo de la Universidad de Reading, dijo: “Las inundaciones causadas por las intensas lluvias de verano se producirán con mayor frecuencia. Ninguna ciudad, pueblo o aldea es inmune a las inundaciones y todos debemos tomar medidas enérgicas ahora mismo si queremos evitar que los impactos empeoren en el futuro”.

La política climática en el mundo se ha centrado en reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, que es una preocupación principal, para reducir el impacto humano en el clima y garantizar que el calentamiento global no alcance niveles catastróficos. Pero los gobiernos han sido advertidos de que se necesitan con urgencia medidas para hacer frente a los impactos del clima extremo, aspecto en el que el planeta se ha estado quedando atrás.

Adaptarse a los impactos requerirá una revisión exhaustiva de la infraestructura, que abarque no solo los sistemas de drenaje y suministro de agua y el transporte, para garantizar que no se colapsen, como acabamos de ver en imágenes de Europa, de Asia o en América del Norte durante este verano boreal.  Nada queda fuera de los requerimientos de adaptación: también el suministro de energía y las redes de comunicaciones.

Los edificios deberán ser rediseñados y las áreas públicas renovadas para incluir mejores canales de drenaje y desagües pluviales, mientras que los enfoques más innovadores podrían incluir pavimentos porosos. La falta de espacios verdes y vegetación, y la pavimentación de muchas áreas sin tener en cuenta el riesgo de inundaciones, ha agravado el problema en muchas ciudades (las sierras chicas de Córdoba son un claro ejemplo).

Neumann dijo: “La planificación y el desarrollo deben considerar el riesgo de inundaciones de todas las fuentes (ríos, aguas subterráneas e inundaciones repentinas) y adaptarse en consecuencia. No es aceptable seguir pavimentando la tierra y esperar que el público se ocupe del agua cuando llega a sus hogares”.