Brasil vive un álgido momento tras registrar más de 11.500 muertos por coronavirus, sumado a la incertidumbre política desatada por la actuación pública y las acciones de políticas de salud públicas tomadas por su presidente, Jair Bolsonaro.

Este lunes, esta tragicomedia vivió otro momento increíble cuando el ministro de Salud, Nelson Teich, se enteró de la decisión unilateral del presidente de abrir gimnasios y peluquerías. 

"No es atribución nuestra, es una decisión del presidente", atinó a decir el funcionario, visiblemente confundido.

Marcelo Freixo on Twitter