Acompañado por sus abogados y luego de ser acusado formalmente de haber conspirado en contra de Estados Unidos para revertir su derrota en la elección presidencial de 2020, el expresidente Donald Trump respondió a los cargos en su contra -la acusación más grave que ha enfrentado un expresidente- con sólo dos palabras: “Not guilty” (No culpable).

Fue la tercera vez en menos de cuatro meses que Trump compareció ante un juez en un tribunal de Estados Unidos acusado de haber cometido un delito. Este jueves Trump se presentó ante la jueza federal Moxila A. Upadhyaya en un tribunal de Washington, D.C., en la causa judicial en la que fue acusado con cuatro cargos de conspiración por el fiscal especial, Jack Smith, vinculados a su intento por revertir el resultado de la elección presidencial 2020 y haber provocado el ataque al Capitolio del 6 de enero de 2021 esparciendo “mentiras generalizadas y desestabilizadoras”, según la acusación.

Se trata nada más ni nada menos que uno de los juicios más importantes en la historia de los Estados Unidos. Sin embargo, Trump puede todavía convertirse en el próximo candidato presidencial por el Partido Republicano y, eventualmente, otra vez en presidente, aun si es condenado.

“Este es un día muy triste para Estados Unidos”, expresó Trump en una breve declaración ante los periodistas en el aeropuerto, luego de la audiencia judicial

El expresidente Trump saluda mientras baja de su avión en el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan de Washington. Foto: Alex Brandon / AP.
El expresidente Trump saluda mientras baja de su avión en el Aeropuerto Nacional Ronald Reagan de Washington. Foto: Alex Brandon / AP.

“Esta es la persecución de un oponente político. Esto nunca debió haber pasado en Estados Unidos, es la persecución de la persona que está liderando por números sustanciales en la interna republicana, estoy superando a Biden por mucho. `No lo podés vencer y lo procesás´. No podemos permitir que esto pase en Estados Unidos”, dijo, y volvió a poner en duda la transparencia del proceso.

La sala del tribunal denotaba solemnidad, acorde a los cargos que se investigan. Tres policías que defendieron el Capitolio contra los extremistas trumpistas que asaltaron violentamente el 6 de enero estaban entre los pocos presentes en la sala del tribunal. “Todo lo que he querido desde el primer día es que se pague”, dijo Harry Dunn, uno de los policías presentes, en un comunicado emitido por su abogado.

Todavía hoy Trump sigue sosteniendo que ganó la elección presidencial, pese a que sus denuncias de fraude no fueron probadas y ninguna de las agencias federales o de los tribunales que investigan los comicios encontró pruebas de un fraude.