Después de la vacunación con la vacuna de Pfizer/Biontech se registran una cantidad significativamente mayor de fallecimientos que con otras vacunas contra el Covid-19 que hoy se aplican.

Así surge del relevamiento que el Centro Gamaleya dio a conocer a través de su cuenta oficial de Tweeter la semana pasada. El dato, pasó notablemente desapercibido en medio de la preocupación por los esporádicos episodios de coágulos asociados a las vacunas Astra/Zeneca y Johnson & Johnson.

Tweet de Sputnik V

Concretamente las cifras reflejan que cuando se computan todas las muertes por millón de personas vacunadas para cada vacuna, Pfizer/Biotench tiene el cómputo más alto, independientemente que se calcule el promedio simple (39,4 personas fallecidas por millón de personas vacunadas) o el promedio ponderado (16,0 fallecidas por millón de dosis aplicadas).

Como lo refleja el cuadro resumen de la publicación citada, las muertes asociadas son menores, en orden decreciente, para las vacunas de Moderna, AstraZeneca, Johnson & Johnson y finalmente la Sputnik V, que registra entre 20 y 4 veces menos de personas fallecidas asociadas a la vacunación según se considere el promedio simple o el ponderado, respectivamente.

El relevamiento incluye datos de 13 países y el extenso hilo detalla las fuentes utilizadas en cada caso por país, sino también la valoración que puede darse a estos episodios, que se registran por protocolo para su investigación, aún cuando las autoridades regulatorias hayan descartado la aplicación de la vacuna como causa probable de muerte.

El detalle de los países incluidos en el recuento

El informe incluyó los datos oficiales de Alemania, Reino Unido, Noruega, Austria, Italia, India Brasil, Chile, Dinamarca, Rusia, EE.UU y también los datos de Argentina, en todos los casos con las vacunas aplicadas y los incidentes reportados hasta el 19 de abril de este año.

Resulta llamativo, la poca difusión que se le dio a una noticia tan significativa, cuando pocas semanas atrás, la prensa internacional se ocupó profusamente de los trastornos en la coagulación provocados por las vacunas de Johnoson & Johnson y AstraZeneca.