Las autoridades mexicanas dieron con los cuatro ciudadanos estadounidenses desaparecidos el viernes en Matamoros, Tamaulipas. Dos fueron encontrados sin vida, otro malherido y un cuarto en buen estado general. 

El gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal, confirmó la información a través de una llamada telefónica en la conferencia de prensa matutina del presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador. Por su parte, Rosa Icela Rodríguez, secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, informó que por los sucesos hay un detenido.

Washington calificó los hechos ocurridos como “inaceptables”. El domingo pasado, además, el FBI había divulgado un comunicado en el que ofrecía una recompensa de 50.000 dólares por información que ayudara a dar con los estadounidenses secuestrados. 

VER: El FBI busca a ciudadanos norteamericanos secuestrados en México

El Fiscal de Tamaulipas comunicó que los dos supervivientes han sido entregados al FBI en el puente internacional que une Matamoros con Brownsville, Texas. El diario El País de Madrid rescata que “una fuente cercana a la dependencia confirma que se trata de una mujer, Latavia McGee y un hombre, Eric James Willliams”. Los dos sobrevivientes a los sangrientos hechos han sido trasladados a un hospital en Texas, informó por su lado la Agencia AP.

El gobernador Villarreal informó que los cautivos fueron rescatados en una casilla de madera, en las afueras de Matamoros. 

El portavoz del Consejero de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, ha explicado en Washington en una llamada con periodistas que “cualquier ataque a uno de nuestros ciudadanos es inaceptable, no importa dónde, ni cuáles sean las circunstancias”

Kirby no ofreció mayor información sobre los fallecidos, porque el deseo de Washington, añadió, es “respetar la seguridad y la privacidad” de las familias. 

Medios de Estados Unidos han informado que los criminales detrás del ataque y el secuestro serían parte del grupo Escorpión, una de las facciones del Cartel del Golfo. Las autoridades mexicanas no han informado al respecto. Matamoros ha sido la cuna del Cartel del Golfo desde su fundación. Diferentes escisiones, como Los Zetas, hace ya más de 15 años, se hicieron fuertes en otros puntos de la geografía fronteriza de Tamaulipas, como es el caso de Nuevo Laredo.

Con información de El País