La Unión Europea, tras una conferencia de más de tres horas, decidió el cierre de fronteras. Se basaron en la iniciativa de algunos países del bloque que ya habían comenzado a realizar controles fronterizos

Con esto, se busca impedir que entren en la zona Schengen ciudadanos de otros países. La medida, de momento, durará 30 días aunque podría ampliarse, según cómo avance el virus.

De todas maneras, hay algunas excepciones: científicos y médicos podrán entrar en el territorio. Dejaron en claro que también podrán hacerlo residentes con antigüedad, familia de nacionales europeos, diplomáticos y trabajadores transfronterizos.  

El único país que no aplicará esta restricción será Irlanda, ya que posee un área común con Reino Unido. "Sabemos que el Reino Unido no va a imponer restricciones en la frontera, y esto afecta a Irlanda, porque tienen una zona de viaje común", expresaron.