Casi tres meses después de abandonar el cargo, confiesa haber presentado su renuncia "una o dos veces cada año" de la gestión de Mauricio Macri. Se trata de la persona que ocupó el máximo cargo en Ciencia y Tecnología en la política nacional durante los últimos 16 años.

Desde la Secretaría transformada en Ministerio por el kirchnerismo, hasta el proceso inverso en el macrismo, el nombre fue siempre Lino Barañao. En las últimas horas, adujo que cada vez que amagaba con irse, "conseguía más presupuesto o entradas a carrera".

Adujo sentirse "muy decepcionado" en los últimos tiempos de 2019, y sentenció no haber votado a Macri.

"Pensé que tenía que ayudar a los técnicos del equipo de Ciencia a cruzar al río. Hubiese ganado en plata y salud si me iba", indicó.