Pese a su rol central durante el kirchnerismo, Guillermo Moreno quedó relegado en la actual gestión de Alberto Fernández. Y en las últimas horas, se mostró crítico tras el anuncio de la intervención de la empresa cerealera Vicentín.

En lo puntual, adujo que "no se puede desplazar al directorio de una empresa que fue avalado por el juez del concurso (de acreedores)", porque "la ley no lo permite". En ese sentido, dijo que el Gobierno "tiene un lío bárbaro en la cabeza".

Según su visión, peronista, "dentro de la ley todo y fuera de la ley, nada". Vaticinó que con esta decisión "se puede quedar con mi ferretería", y "el peronismo no es estatista a tu antojo".

La mención a Alberto Fernández despertó severas críticas hacia el presidente, quien "está equivocado, mostró la hilacha y no sabe nada de derecho comercial", hablando de la situación puntual. "Una vez me dijo que era socialista, pero fue al templo del peronismo, que es Formosa, y dijo que era peronista. Pero entonces tiene que explicar por qué es amigo de (el exministro de Economía, Domingo) Cavallo de toda la vida", agregó.

Simbólicamente, lo comparó con el diario Página 12, porque "es puro título... después bajás un poquito y no tiene nada".

Enojado, indicó que "lo voté pero tal vez haya sido la última vez", aunque sostuvo su autodefinición como "un cumplidor de la conducta partidaria". Por eso "voté a Menem las dos veces".

Refirió haber tenido poco contacto con el actual mandatario durante la gestión de Néstor y Cristina Kirchner, pero le apuntó: "Pese a ser Jefe de Gabinete, nunca estuvo sentado en una mesa donde se tomó una decisión económica importante".

Su crítica, a futuro, es que "el sector privado, que componen los trabajadores, son los que deben defender los intereses de la Patria", no el Estado. "Si después vuelve a ganar (el expresidente, Mauricio) Macri, ¿qué pasa? Si le damos esa facultad a Alberto, después la va a tener cualquiera. Y si le toca a un enemigo del pueblo, puede pasar cualquier cosa".

Diferenciando posiciones internas, sentenció que "los peronistas somos nacionalistas de inclusión, no xenófobos", agregó que "no levantamos muros, sino construimos puentes", y aclaró que "Alberto (por Fernández) tiene otra concepción".