Una pericia oficial desestimó las acusaciones de sobreprecios en el Plan Qunita realizada por la diputada del PRO Graciela Ocaña, informó Página 12.

El Plan Qunita fue lanzado en 2015 y consistía en la entrega de un kit de productos que permitían bajar la mortalidad de bebés entre uno y seis meses.

La denuncia sostenía que los kits eran de dudosa calidad y tenían sobreprecios. El fallecido juez Claudio Bonadio, en ese momento, detuvo la distribución de los kits y se basó en un presupuesto alternativo presentado por Ocaña para sostener que había sobreprecios. Sin embargo, los peritos confirmaron que el presupuesto alternativo tenía fallos como: “la distancia entre los barrotes de esta cuna es peligrosa para un bebé”; “los materiales no cumplen con lo solicitado”; “el kit de la licenciada Ocaña no contempla todos los ítems requeridos en la licitación”.

La Sindicatura General de la Nación estimó que los kits del plan debían valer uno 7.479 pesos, cerca de los 7.850 a los que licitó y dentro del 10 por ciento de margen que permiten las normas.

De esta manera, el peritaje presentado a la Justicia Federal determinó que el kit cumplía con los objetivos y no tenía sobreprecios.