Fue, a priori, una de las primeras localidades que, ante una recomendación del Centro de Operaciones de Emergencia (COE), el máximo organismo provincial en medio de la pandemia, escogió no aceptarla.

Pero posiblemente en General Deheza las cosas no salieron tal como estaba previsto. El intendente, Franco Morra, se negó diez días atrás a paralizar sectores de su industria y comercio cuando se acumulaban los primeros positivos.

En la localidad hasta se contagió el propietario de la aceitera, Roberto Urquía.

Pero el camino posterior estuvo lejos de ser el óptimo, en materia sanitaria. En la última semana se acumularon 62 contagios, siendo 135 desde el inicio de la pandemia. Del total, 35 personas recibieron el alta.

El reporte diario emitido por el municipio este martes dio a conocer que permanecen activos 99 casos, tres de los cuales están hospitalizados. Una persona falleció en los últimos días.