"Yo era el primero en tomar esto a la ligera. Pensaba que era solamente una gripe".

Desde Málaga, España, Guenter Schramm quiere transmitir un mensaje a todos los cordobeses. En particular a aquellos que, pese la información disponible y las medidas dispuestas por los gobiernos, insisten en menoscabar las consecuencias del coronavirus. En especial quienes se sienten inmunes a la pandemia.

Con sólo 25 años y una rutina deportiva para seis días de la semana, el joven cordobés vinculó los primeros síntomas a una "gripe común".

Sin embargo, sólo 48 horas después comenzó a padecer una enfermedad cuyos impactos superaron lo que jamás hubo vivido.

"Cuando empecé con fiebre alta me di cuenta que no era algo común. Tuve que ir a Urgencias. Llegué a tener 40 grados de fiebre, que bajaron a 39. Las radiografías no mostraron neumonía. Me dijeron que aún no tenían los protocolos para el coronavirus, pero me mandaron a casa porque seguramente tenía el covid-19", expresa el novel abogado en diálogo con Crónica del Mediodía.

"Me aislé en casa. Por los próximos días me recuperé bastante y pensé que lo peor había pasado. Comencé a hacer ejercicios en casa, pero a la noche ya no pude respirar. Se me cerró la garganta, el pecho superagitado, me costaba mucho respirar. Durante cuatro días no me pude levantar de la cama. Tuve que hacer reposo absoluto: cualquier cosa me agitaba y sentía un silbido en el pecho", prosigue.

Aunque los malestares atenuaron desde el decimotecer día, gracias al reposo, Guenter destaca que los casos se han seguido propagando.

"Por mi trabajo estoy en la calle hablando con muchas personas. Antes que se declarara el estado de alarma podía ver realmente a mucha gente enferma, de todas las edades, tosiendo y con síntomas. Ahora estamos viendo las consecuencias. La situación en España es crítica. Hay amigos que luchan por su vida por el coronavirus", afirma.

Por ello, su mensaje final no difiere de lo expresado por gobiernos y autoridades competentes. 

"No somos conscientes de la lucha que está llevando a cabo el personal sanitario para protegernos. Lo único que tenemos que hacer es quedarnos en casa", sentencia.