Donde hubo fuego, cenizas quedan. Los incendios finalmente dan descanso en las sierras cordobesas pero las consecuencias son notables.

Así lo dejaron en claro las fotografías captadas por Guillermo Galliano, quien suele tomar imágenes de aves, esta vez captó los gravísimos incendios. En diálogo con Crónica Matinal de Canal 10, el fotógrafo fue contundente:

"El panorama es desolador, triste y desesperanzador"

A su vez, opinó sobre el atraso de las normas ambientales para los incendios: "La Ley como la hizo María Julia Alzogaray en 1996 sigue rigiendo que solo hay que proteger casas y bienes materiales"

Además, afirmó que los bomberos con los camiones hidrantes estaban haciendo guardia de ceniza "mientras a dos montañas atrás la naturaleza ardía con llamas de 15 metros y eso a nadie le importaba".

Por otro lado, lamentó las dos vidas humanas perdidas en la lucha contra los incendios, pero también advirtió sobre la pérdida del ecosistema: "Lo más grave que se ha perdido son nuestras cuencas hídricas, donde bebemos el agua y disfrutamos el turismo todos los cordobeses".

El fotógrafo también se mostró preocupado por la perdida de la biodiversidad y habló específicamente de la loica, una especie de ave oriunda de Sudamérica. De ella hablan en una nota de la Fundación Mil Aves y son uno de los animales más afectados por los incendios: "Esa especie habita exclusivamente en los pastizales y en esta época del año arranca con el cortejo, a construir su nido y poner sus huevos"

Por último, reflexionó sobre lo que significará la pérdida total por los incendios: "Van a ser más de 200.000 hectáreas perdidas y el hábitat de cientos de animales, realmente va a ser desolador, muy pocos magnificamos la pérdida que hemos sufrido los cordobeses"