La insólita historia de una familia de Mendiolaza, provincia de Córdoba, que quedó demorada en San Luis ante la falta de identificación de sus integrantes y las respuestas absurdas brindadas por la pareja, va camino a esclarecerse. El misterio se develó en parte y los “ciudadanos del mundo” podrían regresar pronto a su hogar, aunque la “terranave” en la que se transportaban quedó secuestrada.

Se conoció que el jueves pasado, el juez de Familia de San Luis, José Ramiro Bustos, dio por acreditada la identidad de la pareja y de los niños que el lunes ingresaron a la provincia con documentación apócrifa pero que, según ellos, es de jurisdicción internacional. 

Finalmente, un familiar que reside en Chile, aportó documentos de identidad argentinos y chilenos que dieron cuenta de sus verdaderos nombres y nacionalidades de los demorados, salvo de la hija menor, que nunca fue inscripta en ningún registro civil.

Ver: Una familia cordobesa fue demorada: viajaban en una “terranave” y dijeron ser “ciudadanos del mundo”

Según publica El Diario de la República,  la Justicia Federal aguarda un informe para cotejar dichas identificaciones y saber de ese modo si Sergio y An, no tienen pedidos de captura nacional o internacional.

Fuentes judiciales aclararon que en ningún momento el grupo familiar de Córdoba fue separado y dijeron que desde el jueves por la noche ya no está en el Destacamento 40 de Los Cajones, sino que fue trasladado “con custodia” a una casa particular.

Las credenciales como “ciudadanos del mundo” que exhibió la pareja a la Policía. Foto: Medidor en Red
Las credenciales como “ciudadanos del mundo” que exhibió la pareja a la Policía. Foto: Medidor en Red

Cabe recordar que el miércoles, en una audiencia, el juez federal Carlos Nacul y otros funcionarios trataron de llevar adelante una reunión virtual con la pareja para que se identificaran y sin embargo no lo lograron, ya que no fueron reconocidos como autoridad.

Ante la falta de colaboración, la Justicia Federal ordenó la extracción compulsiva de huellas dactilares de los adultos, pero finalmente accedieron a hacerlo voluntariamente el jueves a la mañana. Esas impresiones serán cargadas al Registro Nacional de las Personas (Renaper) y al Registro Nacional de Reincidencia (RNR) para ver si hay coincidencia con sus DNI y también saber si registran algún tipo de antecedente penal a nivel nacional. En el ámbito internacional, la consulta se hará a través de la colaboración de Interpol.

El misterio de la hija menor

Luego de aportar la documentación requerida, An entregó una declaración jurada en la que afirma que su hija menor, quien actualmente tiene 2 años, nació asistida por su padre Sergio y que es su descendencia, o “extensión”, como llaman a los hijos. 

“Con esa declaración jurada, el juez Bustos dio por sentado que el nacimiento se produjo y que la madre es la que dice ser en conjunto con el padre”, explicó el juez federal, aunque el magistrado de Familia instó a la pareja a que en el lapso de 72 horas asiente a la pequeña en el registro civil del país que corresponda, que, en principio, sería Chile.

“Luego podrán seguir viaje”, confirmó el juez Nacul. El tema es en qué vehículo, debido a que aún debe resolverse la situación de la camioneta Honda CRV gris en la que circulan, a la que llaman “terranave”, y que tiene una patente casera con la inscripción UCC-1-308 y la frase “propiedad privada”, no coincidente con la de ningún país.

El juez federal Juan Carlos Nacul está a cargo de la causa. Foto: lagaceta.com.ar
El juez federal Juan Carlos Nacul está a cargo de la causa. Foto: lagaceta.com.ar

Según An, la “terranave” no requiere de papeles, ya que fue dada de baja en Chile y ya no pertenece a la “corporación”, como denominan al sistema social ordinario y sus instituciones.

El viernes, el fiscal federal de San Luis, Cristian Rachid, informó que la camioneta quedará secuestrada por no tener documentación y bajo la sospecha de que se trataría de un vehículo importado de forma irregular.

“Soberanos reales naturales”

El miércoles a la mañana, en la frustrada audiencia, An interrumpió a los funcionarios judiciales alegando: “Ustedes no son autoridad. Mi autoridad es el Primer Creador, como la de todos los seres vivos. Ustedes son interdictos”.

"Soy una mujer viva, vengo aquí con la ley de la tierra en la que nací y que me acompaña a donde yo voy. Ese es el derecho de las gentes, usted no tiene jurisdicción sobre nosotros, son incompetentes para administrar nuestros asuntos”, indicó la mujer. 

Luego arremetió contra Nacul y Rachid al decirles que “Nos tienen aquí secuestrados hace 48 horas y no nos han dado ninguna causa de delito. No hemos cometido ningún delito y ustedes nos están obligando o queriendo coaccionar para que nosotros nos identifiquemos con una ‘ficción jurídica’, la cual es del Estado y no nuestra”.

La policía de San Luis retuvo a la familia cordobesa y ahora la custodia mientras se cotejan sus datos. Foto: Infobae
La policía de San Luis retuvo a la familia cordobesa y ahora la custodia mientras se cotejan sus datos. Foto: Infobae

Y luego increpó al magistrado: “¿Dónde dice en la Constitución que un habitante de la nación deba asociarse a la ‘ficción jurídica’? No es la misma jurisdicción. Usted está cometiendo un delito para con nosotros. No somos ciudadanos, somos soberanos, no tiene jurisdicción, no son una autoridad para con nosotros”.

La “carta magna” por la que se rigen los ciudadanos del mundo

Según publica El Diario de la República, la familia cordobesa -y otros “ciudadanos del mundo” que residen en diferentes partes del planeta- se rigen por su propia “carta magna”. A continuación, un extracto de lo que la misma indica:

“Nosotros, eterna esencia, completamente manifestada en cuerpo de carne, hueso y sangre incluyendo esta encarnación en particular, también percibida como ‘las gentes’, nos reunimos en este sentir constituyente bajo la protección del Primer Creador para el bien común de los seres, para la justicia real, para manifestación de la vedad absoluta, para reprimir la mentira y erradicar el deshonor aquí y en cualquier lugar en el que se manifieste en esta ‘terra nulius’ (tierra de nadie en latín) sin fronteras que constituye el plano donde vivimos, decretamos y declaramos que la citada Carta Magna es válida para todos los seres vivos de la Tierra incluyendo su naturaleza geográfica y lo contenido en ella, y que no podrá ser impugnada por subrepción, obrepción, nulidad ni aun de carácter extraordinario, por cualquier otra fuerza o defecto, ni aplazados o impedidos. Sus efectos son que perpetuamente valdrán y tendrán plena confirmación y firmeza, y será irrito e ineficaz lo que por cualquier autoridad ficticia, conscientemente o por ignorancia, pudiese atentar contra ello. Por lo tanto, es ilícito para ninguno de nosotros violar esta página de nuestra confirmación, aprobación, comunicación, constitución y mandato o ir en contra de ella con impudencia temeraria. Pero si alguno se atreve a intentarlo, hágale saber que incurrirá en la indignación del Primer Creador”.