El Juzgado Ejecución Penal Nº 2 de Resistencia informó que previo al traslado del preso Roberto José Carmona se libraron los oficios y exhortos de rigor al Juzgado de Ejecución Penal en turno de Córdoba capital y al Servicio Penitenciario de la provincia de Córdoba, como también al Complejo Penitenciario II de Sáenz Peña, en Chaco.

La actual titular del juzgado, Ligia Duca, señaló en un comunicado que tal como ocurría desde mayo de 2014, cuando fue incorporado al régimen de salidas transitorias, Carmona únicamente estaba autorizado a visitar a su esposa en el domicilio de ella ubicado en el barrio Las Violetas de la capital cordobesa.

Cabe recordar que en la jornada del miércoles, la jefa de la Policía de Córdoba, Liliana Zarate Belletti había anticipado que la fuerza no había sido notificada por ningún organismo de la presencia del peligroso delincuente en la provincia, cuestión que ahora se sabe, había sido comunicada al Servicio Penitenciario cordobés y la Justicia provincial.

Las pautas actuales, fijadas en febrero de 2016, continúa el escrito difundido desde el Poder Judicial chaqueño, le permitían visitas de nueve horas diarias durante tres días cada cuatro meses; siempre con fuerte acompañamiento y custodia de personal penitenciario no uniformado. El resto del tiempo que se encontraba en dicha ciudad el condenado permanecía alojado en el Complejo I "Reverendo Francisco Luchesse", hasta que era trasladado de regreso a Sáenz Peña.

Eso mismo quedó plasmado en la resolución 407/22 del 1 de diciembre que ordenó su traslado junto a una comisión integrada por cinco agentes penitenciarios y un enfermero.

Actualmente, Carmona está detenido en la cárcel de Bower e imputado por los delitos de homicidio criminis causa, robo calificado con arma y evasión en concurso real por los hechos que lo tuvieron como protagonista luego de su fuga.

También están alojados en Bower los seis agentes penitenciarios chaqueños responsables de su cuidado, quienes están imputados por evasión. 

Por razones que aún no se lograron esclarecer, Carmona se fugó del lugar. Posteriormente se subió a un taxi, atacó al chofer y lo mató. Seguidamente, el recluso no pudo controlar el auto y chocó en la intersección de las calles Santa Ana y Félix Paz.

Tras el choque, Carmona cruzó la calle Santa Ana, ingresó a la playa de estacionamiento de un hipermercado, donde los únicos clientes eran una pareja, y, a punta de arma blanca, les robó el automóvil.

Con ese vehículo, atravesó gran parte de la ciudad y se dirigió hasta el CPC de Villa El Libertador. El rodado apareció abandonado detrás del mismo.

Finalmente, cerca de las 18:30 horas, el peligroso preso fue detenido. Fue un agente de las brigadas civiles quien lo vio caminando en la calle Almirante Brown, casi Luis Agote, en barrio Los Naranjos, se le fue encima y, con ayuda de otros uniformados, logró detenerlo.