Con la expectativa de un fallo que puede ser histórico se retomará este viernes el juicio en los Tribunales de Cruz de Eje, por el femicidio de Cecilia Basaldúa, la joven de 36 años oriunda de Buenos Aires que fue violada y asesinada en Capilla del Monte en abril del 2020. 

Si bien se espera el resultado de ADN que compruebe si las pruebas aportadas por la querella abren una nueva línea de investigación, que en su momento fue desestimada por la fiscal Paula Kelm, el proceso seguirá con los alegatos y posteriormente la sentencia. 

La querella de la familia de la víctima aún tiene muchas dudas sobre la investigación y lo que sucedió durante el juicio. 

La confesión en comisaría

El único acusado es Lucas Bustos, un peón de albañil, cuya única prueba en su contra es su confesión en comisaría bajo presuntos apremios ilegales. Por este motivo la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación se constituyó en querellante. 

Para la querella, se indicó que no hay prueba directa contra el imputado, sino indicios. Se incorporó a la causa, un testimonio donde Bustos afirma que "nunca dijo ser el autor de la muerte de Cecilia". 

Bustos estuvo dos años en prisión preventiva y recuperó su libertad el 9 de junio a pedido de su defensa y ante la falta de nuevos argumentos para sostener la medida del fiscal de Cámara, Sergio Cuello. 

El rol de Mainardi 

Es el dueño de la casa donde se alojaba la joven al momento de su desaparición, y para la familia de Cecilia, el principal sospechoso. 

Declaró en calidad de testigo y en cierta manera cuestionó la forma de vida de la víctima, sus creencias y a su familia. Además, borró las conversaciones de su celular, evidencia importante para aclarar su situación. 

Aseguró que vive en Rosario, donde trabaja de remisero y negó conocer a alguna persona de la fuerza policial. Expresó que conoció a Cecilia el 24 o 25 de marzo de 2020, a través de su amiga -desde hace 25 o 30 años- Viviana Juárez. 

Vale recordar que Mainardi obtuvo el permiso para viajar a Rosario, Santa Fe, de la fiscal Paula Kelm antes del crimen, en plena cuarentena que impedía el traslado en el país por la pandemia del Covid. 

El rol de los policías 

Se hace foco en los efectivos que tomaron la declaración en comisaría de la confesión de Bustos.  Según la querella, el relato está "guionado". 

VER: Femicidio de Cecilia Basaldúa: "Seguimos demostrando el encubrimiento de la policía"

Además el fiscal apartó a uno de los jurados por haber sido policía, sin embargo el presidente del Tribunal, Carlos Escudero, también perteneció a la fuerza  entre 1981 y 1997. 

VER: Juez de "corazón azul": el presidente del tribunal del caso Basaldúa es policía retirado

El lugar donde fue encontrado el cuerpo

Para la fiscal Kelm, Cecilia muere por estrangulamiento y asfixia. El cadaver fue hallado en las cercanías a un basural. 

Sin embargo las medicas forenses de Medicina Legal declararon que el cuerpo no tenía ningún rastro de mordeduras o ataques de alimañas de la zona, "lo cual resulta extraño si se sostiene que el cuerpo siempre estuvo a la intemperie. La medica tampoco pudo determinar si el cuerpo había sido trasladado o no a ese lugar. 

Walter Luna, arrendatario del terreno donde fue encontrado el cuerpo, declaró que cuatro días antes del hallazgo había pasado por ese lugar y que "no había nada". Este testimonio fue desestimado. 

La prueba aportada que fue desestimada 

Se trata de una denuncia realizada a la Policía que aseguran que en su momento no fue investigada por la fiscal Paula Kelm.

Una de las abogadas de la familia Basaldúa, Daniela Pavón, aportó la prueba, tras recibir un llamado por una denuncia que fuera realizada ante la Policía hace dos años, por una persona que asegura que lo denunciado nunca se investigó.

Se trata puntualmente de denuncia sobre el hallazgo de un colchón con sangre que fue encontrado por el propietario de una casa cercana al basural de Capilla del Monte, donde apareció el cuerpo (el 20 de abril). El dueño es de apellido Rojas y no había ido a esa vivienda con motivo de la cuarentena. Se hizo presente el 15 de mayo de 2020 y había encontrado violentado el cerramiento y en el interior más elementos de una escena violenta. 

Se espera el resultado de las pruebas de ADN que se darán a conocer el viernes. 

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