Michelle Sallas se convirtió en un personaje central de la segunda temporada de a serie de Luis Miguel.

La hija que el cantante reconoció públicamente cuando ya era casi adulta se muestra en sus fases de niña y a los 19 años. La relación fluctuante del padre que prioriza su relación laboral; las ideas de márketing que por entonces desaconsejaban mostrar a los ídolos con parejas o en familia; y la conflictos con sus representantes fueron también tramas vertebrales en la temporada. Pero el último capítulo de la segunda fue lo que enojó a Michelle y la hizo salir a dar su opinión. Salas es influencer pero intenta no vincularse demasiado a la vida de su padre. Más allá de su rol en redes sociales, mantiene en reserva la intimidad de su vida como hija de Luis Miguel y pocas veces habla de la relación entre ambos.

¡Alerta Spoiler!

En el episodio final se ve como Michelle y el amigo y representante de Micky, Mauricio Ambrosio, se escapan a un viaje secreto en pareja a Madrid. Un reportero saca fotografías de los dos y se las envía al cantante a modo de extorsión.

En esos días en Madrid, hay escenas de sexo explícito entre Michelle y Mauricio. Lo cierto es que ellos nunca confirmaron haber estado en una relación, aunque las fotos de ambos paseando por Madrid sí existieron en la vida real.

Al respecto, Michelle habló en sus historias de Instagram asegurando que no dio su consentimiento ni fue consultada si quería ver su vida reflejada en una serie de televisión.

"Primero que nada, me parece importante aclarar que yo no permití en ningún momento el uso de mi imagen, mi vida y mi imagen personal", explica.

Semanas atrás, cuando se vieron las primeras apariciones de ella en la serie, se había pronunciado con cautela y había asegurado que quizás, en algunos años, sí le gustaría hablar de la relación con su padre.

"Y de pronto así, me encuentro en la necesidad de hablar. Muchos saben que nunca he sido una persona a la que le gusta aclarar rumores. Siempre me he mantenido al margen de escándalos y opiniones, aunque se traten de mí porque a lo largo de mi vida he aprendido que es mejor para mi salud mental y para cuidar a los que me rodean", escribió la influencer en sus historias.

Las declaraciones continuaron apuntando directamente a las decisiones de la producción: "Sí, he vivido momentos inolvidables con mi padre y me da gusto que puedan conocer una pequeña parte de la relación que hemos tenido. Pero tengo que decir que me parece verdaderamente innecesaria, irrespetuosa y desafortunada la manera en que la producción decide tratar a una mujer, su hija, para terminar este capítulo de su historia. Sexualizándola explícitamente a los 19 años de edad y violentando su intimidad".

Michelle se suma a una lista de personas que se sienten vulneradas al ver cómo fue tratada su imagen en la serie, con el agravante de que en esta oportunidad se trata de un aspecto absolutamente íntimo de la vida de quien por entonces, sólo tenía 19 años.

"No es justo que utilicen mi vida y mi historia como si tuvieran los derechos de ésta  y además la distorcionen a su conveniencia", agrega en el comunicado.

Quizás la producción se ampare en la ficción, pero lo cierto es que se trata de personas reales, se afecta su reputación y se manipulan sus historias, lo que seguramente tendrá consecuencias legales.